La Rueda del Dharma en el budismo representa las enseñanzas y prácticas que conducen a la iluminación, simbolizando un ciclo interminable de enseñanzas del Buda adaptadas a las necesidades de los seres sintientes. Este símbolo refleja la naturaleza cíclica del sufrimiento y la ruta hacia la iluminación, enfatizando la compasión y el beneficio de todos.
El 4 de junio es el Día del Dharmachakra, donde el budismo celebra la primera enseñanza de Buda en este mundo, o el primer giro de la rueda del Dharma. Este símbolo es uno de los más importantes en dicha religión, porque representa las enseñanzas y prácticas budistas difundidas por amigos espirituales para cultivar la iluminación, además simboliza el ciclo interminable de las enseñanzas del Buda, adaptadas a las necesidades de los seres sintientes.
Se trata de un ciclo de enseñanzas que guía a los practicantes hacia la iluminación y la comprensión de la realidad, representando la naturaleza cíclica de las enseñanzas y la práctica budista que lleva a la liberación y la iluminación.
En este día, es importante meditar en torno a esta idea, por ejemplo, con la llamada “Oración de las siete ramas”, que compartimos a continuación:
Respetuosamente me postro con cuerpo, palabra y mente,
os presento ofrendas materiales e imaginadas,
confieso mis malas acciones del pasado,
y me regocijo de las virtudes de los Seres Superiores y ordinarios.
Por favor, permaneced junto a nosotros hasta el fin del samsara,
y girad la Rueda del Dharma a los seres migratorios.
Dedico todas las virtudes para la gran iluminación.
Sigue leyendo en la Edición N°134 de Revista Mundo Nuevo.
Fuentes: