“Cuando la alimentación es buena, la medicina no es necesaria, y cuando la alimentación es mala, la medicina no es efectiva”. Este proverbio del Ayurveda levanta la importancia de una buena alimentación en la salud, con base en el autoconocimiento y los tres doshas o constituciones personales que existen según esta medicina nacida en el subcontinente indio. Compartimos una mirada sobre nuestra alimentación según la medicina ayurvédica, en base a los seis sabores que existen, extraídos de un artículo publicado por la Dra. Pachiti Kininkar Patwadhan.
Originaria del subcontinente indio y con más de 5.000 años de antigüedad, la Medicina Ayurvédica basa sus principios en la teoría de que todo el Universo está compuesto por los cinco elementos fundamentales o panchamahabhutas: bhumi (tierra); yala (agua), agní (fuego), vaiú (aire) y akasha (éter o espacio) siendo estos los cinco componentes esenciales de Prakriti, es decir, de la manifestación del Universo.
Según el Samkhya, que es la cosmovisión de la creación según el Veda, los Maha Bhutas se originan del Dios mismo, del Brahman, y el orden de su creación va de los más sutil (akasha – éter) a lo más denso (bhumi – tierra), dónde cada uno se crea a partir de otro, siendo así una decantación paulatina hacia la materia física.
Todas las ciencias Védicas, como el Ayurveda, Yoga, Jyotish (Astrología) entre otras, tienen como base esta teoría o cosmovisión elemental de la creación de los elementos y la materia, por ende, lo que buscan, de una manera u otra, ya sea con la alimentación, la práctica espiritual o el estudio de los astros, es armonizar o equilibrar los Maha Bhutas tanto en nosotros mismos como en el Universo que nos rodea.
Para esto, Ayurveda basa la teoría de los cinco elementos en el concepto Tridosha Siddhant, dónde utiliza el concepto “humores biológicos” o “biotipos” para definir a las energías que constituyen nuestro cuerpo/mente a través de los Maha Bhuta, que cuando se combinan generan tres energías conocidas como Vātta, Pitta y Kapha.
- Vātta: El principio del movimiento, se compone de los elementos Aire y Èter.
- Pitta: El principio de la transformación, se compone de Fuego y Agua.
- Kapha: El principio de la cohesión, se compone de Tierra y Agua.
Entender los mahabhutas y la Tridosha nos permite potenciar la longevidad de nuestro cuerpo físico, previniendo y sanando enfermedades a través de la alimentación o el uso de hierbas de manera terapéutica y medicinal.
En palabras de Sushruta Samhita: “Es saludable (Swastha) aquel cuyos Doshas (tres bioenergías), Agnis (fuegos), y las funciones de sus Dhatus (tejidos) y Malas (residuos) están en equilibrio; cuya mente, intelecto y órganos están brillantes y gozosos.”
El equilibrio en los sabores
La farmacodinámica de Ayurveda se explica como rasapanchak, que incluye guna (atributos), karma (acción), rasa (sabor), vipaka (efecto post digestivo) y veerya (potencia). Esto porque la ciencia ayurvédica va más allá de las propiedades físicas o químicas de un elemento, ya que su comportamiento cambia según se trate de un medio externo o de nuestro sistema (la química es exacta, pero la biología tiene sus propias reglas). Es por eso que un mismo alimento no funciona igual en una persona u otra, porque en el sistema la sustancia actúa en combinación con los cinco elementos y la conciencia.
Bajo este concepto biológico de grupo de cualidades, rasa se define como la percepción particular y subjetiva del sabor por parte de un órgano sensorial. Es la acción directa de la sustancia en el nervio que termina en la membrana mucosa de la lengua.
El elemento raíz del sabor es el elemento agua, pero para la manifestación del sabor son necesarios los elementos agua y tierra como las causas inherentes, mientras que los elementos fuego, espacio y aire producen la diferenciación.
Tomando esto como base, en Ayurveda existen seis sabores. ¿Por qué seis? Porque existe una correspondencia con las estaciones: seis estaciones y seis sabores. Cada sabor es dominante en una estación y lo tenemos en cuenta para el régimen estacional, a su vez, cada sabor tiene dos elementos predominantes:
1. Dulce: agua + tierra
2. Ácido: fuego + tierra
3. Salado: agua + fuego
4. Amargo: espacio + aire
5. Picante: fuego + aire
6. Astringente: tierra + aire
Adicionalmente, los sabores pueden clasificarse como:
1. Sabores de energía lunar dominante: dulce, amargo y astringente.
2. Sabores de energía solar dominante: picante, ácido y salado.
3. Sabores con cualidad untuosa (grasas o pegajosas).
4. Sabores con cualidad seca.
Tomando esto en consideración, cada sabor produce unos efectos en nuestro organismo, que podemos utilizar para diseñar la dieta más saludable en cada momento y en cada constitución. De este modo:
1. Dulce
· Es untuoso, frío y pesado.
· Reduce vātta y pitta, e incrementa kapha.
· Nutre, fortalece.
· Facilita la eliminación de productos de desecho.
· Beneficioso para la piel.
· Reduce la sensación de ardor.
· Beneficioso para el intelecto.
· Incrementa la vitalidad.
2. Ácido
· Es ligero, caliente, penetrante, untuoso.
· Reduce vātta, incrementa kapha y pitta.
· Digestivo.
· Facilita la eliminación de productos de desecho.
· Nutre.
· Fortalece los órganos sensoriales.
· Beneficioso para el corazón.
· Incrementa la vitalidad.
3. Salado
· Es untuoso, caliente, un poco pesado (de digerir).
· Incrementa kapha y pitta, y reduce vātta.
· Digestivo.
· Reduce la obstrucción.
· Crea suavidad en el sistema.
4. Amargo
· Es frío, seco y ligero
· Incrementa vātta, y reduce kapha y pitta.
· Digestivo. Combate los parásitos.
· Retiene productos de desecho.
· Ayuda en el metabolismo celular.
· Tonifica el tejido muscular.
· Desintoxica el tejido sangre.
· Potencia el intelecto.
· Reduce la fiebre y sensación de ardor.
5. Picante
· Es ligero, seco, caliente, penetrante.
· Incrementa vātta y pitta, y reduce kapha.
· Digestivo.
· Retiene los productos de desecho.
· Ayuda a reducir el tejido graso y flacidez.
· Estimula la ovulación y menstruación.
6. Astringente
· Es pesado, seco y frío.
· Incrementa vātta, y reduce kapha y pitta.
· Acción absorbente.
· Acción astringente (heces y orina).
· Hemostático
· Cicatrizante
Salud es equilibrio
Ayurveda nos dice que la salud en equilibrio se genera a través del entendimiento de nuestra propia constitución o Pakruti, lo cual nos permite tener nuestros humores biológicos Vata, Pitta y Kapha en equilibrio. También por medio de una condición balanceada de su fuego digestivo (Agni) que permite digerir de manera armoniosa los alimentos, para lo cual el conocimiento de cada sabor nos ayuda a entender sus cualidades y acciones. No solo en el organismo, sino también sobre nuestra propia constitución, y para que podamos elegir adecuadamente lo que es beneficioso o no para nosotros, solo tenemos que aplicar el principio de samanya vishesh: similares aumentan similares y opuestos disminuyen.
Un ejemplo simple, sería entender que si tengo una condición que me habla de un exceso de calor, como una gastritis, lógicamente los alimentos que sean calientes tenderán a exacerbar el fuego dentro de mí. A su vez, si tengo una condición en la mente que nos habla de un exceso de aire, como lo es la rumiación mental, un estilo de vida en movimiento o una alimentación demasiado astringente y seca, tenderán a exacerbar este desequilibrio.
De este modo, al entender la sustancia por su sabor, comprendemos la limitación que implica agrupar alimentos sólo por su condición de proteína, grasa o azúcar. Por ejemplo, la proteína animal es dulce y astringente (carne blanca) o solo dulce (carne roja). Las legumbres, que son proteína vegetal, presentan un sabor astringente y son secas. Por lo tanto, aunque se trate igualmente de proteína, según Ayurveda no es equiparable en su efecto fisiológico. De hecho, puede tener acciones totalmente opuestas.
En esta lógica, el consumo de alimentos con un único sabor dominante, o su exceso, puede dar lugar a desequilibrios y ser causa de enfermedad, por lo que es importante ser cuidadosos antes de probar dietas de moda, como solo jugos o solo ensaladas, por ejemplo.
Este conocimiento también nos lleva al orden de los sabores en una comida. En este punto es importante considerar que al momento de la comida el estómago está vacío, siendo el elemento espacio o éter el predominante. Por eso, debemos empezar con un sabor dulce. Esto no significa empezar por el postre, sino por algún elemento como trigo arroz, o distintos vegetales como zapallo italiano o papas.
Después en mitad de la comida debiésemos incorporar los sabores ácido y salado, puesto que ayudan a incrementar la capacidad digestiva, y al mismo tiempo reducen el elemento aire y espacio o éter.
Los sabores amargo, astringente y picante deben consumirse al final de la comida, ya que ayudan a la digestión gracias a su acción absorbente. No es recomendable consumir frutas dulces o yogurt después de la comida puesto que ya hemos equilibrado los elementos desde el más sutil hacia el más denso.
Ahora bien, este es el criterio general, sin embargo, como se mencionó anteriormente, todo depende de la persona, su constitución individual, su estilo de vida, cuál es el clima de la región en la que vive, la salud de su Agni digestivo, entre otros factores . Por ejemplo, si alguien tiene una capacidad de digestión lenta, entonces puede empezar su comida con un trozo de jengibre y una pizca de sal, ya que esta combinación picante y salada es aperitiva.
Finalmente, es importante recordar que en Ayurveda, la mente y el cuerpo están profundamente interconectados, por lo que cada sabor tiene efectos emocionales y psicológicos. Por ejemplo, los sabores dulces y amargos pueden ser calmantes y relajantes, mientras que los sabores picantes y ácidos tienden a ser estimulantes y energizantes.
Al incorporar todos los sabores en la dieta, se asegura que todos los aspectos de la vida, tanto físicos como mentales, estén equilibrados y nutridos adecuadamente. Es por eso que los seis sabores en Ayurveda no solo son esenciales para una dieta equilibrada, sino que también están profundamente vinculados con la salud general, el bienestar emocional y el equilibrio energético. La clave está en consumirlos de manera adecuada, según las necesidades individuales y el contexto de cada persona.
Fuentes:
Escuela superior de ayurveda, Madrid, España. Escrito por la Dra. Pachiti Kinikar Pathwardhan; 2020. Disponible en https://esayurveda.com/sabores-en-ayurveda-importancia-y-usos/#Farmacodinamica_ayurvedica