¿Por qué a veces nos sentimos cansados sin causa aparente? De acuerdo al Dr. Joseph Mercola (www.mercola.com), la clave estaría en el contacto con algunos productos químicos artificiales, campos electromagnéticos y aceites de semillas procesados que causan enfermedades crónicas. Por eso, es importante para mantener una salud óptima, explica, observar su intestino, sus sistemas de hormonas y su entorno para entender por completo qué le sucede.
“Tener un intestino sano es fundamental para su bienestar. Si las bacterias intestinales saludables no pueden prosperar, el cuerpo se enfrenta a un obstáculo tras otro. Es necesario mantener un ambiente libre de oxígeno para que prosperen las bacterias beneficiosas que crean ácidos grasos de cadena corta, como el butirato, el propionato y el acetato. Estos compuestos ayudan a fortalecer el revestimiento del colon, ya que nutren las células que recubren la pared intestinal”, señala y agrega que se necesita energía de las células para mantener bajos los niveles de oxígeno en el colon. “Entonces, si sus mitocondrias no funcionan de manera adecuada y la energía de sus células es baja, quizás tenga un exceso de oxígeno en su colon que estimula las bacterias dañinas”, agrega.
Para ayudar a las mitocondrias, el médico recomienda eliminar las toxinas del plástico, apagar el Wi-Fi por la noche, elegir botellas de vidrio y evitar consumir aceites de semillas. Así, a medida que la salud intestinal mejora, se pueden introducir mejores fuentes de fibra que alimenten los microbios intestinales beneficiosos, favoreciendo la producción de mucina, la cual nos protege del intestino permeable.
“Las mitocondrias son el núcleo de la historia de su salud. Ellas deciden si tiene la energía para prosperar o si lucha contra la fatiga crónica y el estrés de las células. Cuando aborda los cuatro factores estresantes principales (aceites de semillas, sustancias químicas que alteran el sistema endocrino, endotoxinas y campos electromagnéticos), sus mitocondrias se liberan y funcionan en su mayor rendimiento. De esta forma, deja de alimentar los procesos que destruyen su intestino y disminuyen su energía”, concluye el Dr. Mercola.
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